En las sombras del inconsciente,
brota una luz de amor,
que embriaga el existir
aleteando halitos
en deseos de vivir
y en cantares de pasión.
Soy esclavo, cantor
de recuerdos,
esclavo a tus palabras
que atormentan
y me llaman a escribir
a plasmar lo que tu ser
inmaculado inspira.
Soy cantor de añoranzas
que busca en lo infinito
esa sonrisa perlas de mar
y escruta en tu mirar
la pócima que roba
mis pasiones y enardece
dando tumbos, vuelcos de amor
a una ilusión azul,
perdida en el inefable
deseo de estar azulado .
A su lado como cantor,
¡cantor de amores!;
a su lado como pintor,
¡pintor de ilusiones!;
a su lado como ladrón
¡ladrón de pasiones!;
a su lado como alquimista,
hacedor deleite en brebajes
que me convenzan por siempre
que ¡eres mi piedra filosofal!;
Quiero apoderarme de tu celo,
y ser carcelero de tus deseos;
quiero robarme todo tu cielo
y ser artífice de tu infierno;
quiero hacerte mía en la furia
y bendecirme en tu calor;
quiero ser reflejo de tu espejo
imagen de tus palabras y acciones;
quiero sumirme a tu mansedumbre
y postrarme fiel a tu regazo .
Todo, todo lo deseo de tí;
amo el sol que te cobija
adorando y bendiciendo tu existir;
suspiro por el agua que te baña
y se despliega rindiéndose a tus pies;
amo la desnudez en tus palabras,
en tus acciones y en el silencio;
amo ese silencio que otorga palabras
a tu sentir y clama sinuoso por mí.
Ayer quise hacerte mía,
violarte en mis recuerdos
mancillarte con mis versos
vivir eterno en tu pasión;
hoy, despierto del letargo
y te veo tan mía y tan lejana
tan distante y tan efímera
tan cierta y tan presente
tan tímida y tan deseosa
que tus delirios se estremecen
y niegas el éter de tu frenesí;
mañana, enloquecidos y con furia
desbordaremos en deseo
y como ángeles en celo
conrearemos un altar
donde se agiten con ímpetu
nuestras pasiones, connubio
espasmódico, clímax total;
calma a esta sed ardiente
de todas nuestras ilusiones
que se queman y se funden
en pentagrama de canciones,
canciones en notas y notas
de eterno y sempiterno amor...